Concedieron arresto domiciliario al jubilado chaqueño acusado de amenazar al presidente Milei

Tras permanecer casi diez días detenido en condiciones precarias, D.R.V., el jubilado chaqueño imputado por amenazas contra el presidente Javier Milei y otras figuras públicas, fue beneficiado con el arresto domiciliario. La medida fue dispuesta el pasado viernes por el juez federal Ariel Lijo, en cumplimiento de una resolución emitida por la Sala I de la Cámara Federal de Apelaciones porteña.
Los camaristas Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi rechazaron el pedido de excarcelación presentado por la defensa del acusado, representada por el abogado Ignacio Funes Peralta, pero autorizaron que la detención se cumpla en su domicilio en Resistencia. La decisión incluyó la imposición de una serie de medidas restrictivas: retención del pasaporte, prohibición de salida del país y colocación de un dispositivo electrónico de monitoreo permanente.
El imputado había sido detenido el 2 de julio por personal de la División de Delitos Tecnológicos Complejos de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, tras ser acusado de realizar amenazas a través de redes sociales desde una cuenta bajo el seudónimo «Elpidio Sánchez». Las publicaciones estaban dirigidas no solo al presidente Milei, sino también al primer ministro israelí Benjamín Netanyahu y a periodistas vinculados al oficialismo. Durante el allanamiento en su vivienda, las autoridades incautaron una carabina calibre .22 y cuatro armas de aire comprimido.
En los primeros días de su detención, D.R.V. fue alojado en una oficina de la Comisaría Tercera de Resistencia, sin acceso a condiciones mínimas de higiene ni atención médica, pese a su cuadro de hipertensión crónica. También carecía de contacto regular con su abogado defensor. Ante esta situación, el Comité para la Prevención de la Tortura del Chaco interpuso un hábeas corpus correctivo, que fue resuelto favorablemente por la jueza federal Zunilda Niremperger. La magistrada ordenó mejorar las condiciones de detención, garantizando cama, colchón, atención médica, contacto irrestricto con su abogado y resguardo frente a la exposición mediática.
Posteriormente, fue trasladado a la sede de la Policía Federal Argentina en el centro de Resistencia, donde las condiciones fueron adecuadas. Finalmente, el viernes por la tarde fue escoltado por personal policial hasta su vivienda, donde comenzó a cumplir con la modalidad de arresto domiciliario.
No obstante, la familia del imputado denunció que aún no recibió copia de la resolución judicial que establece el alcance de las medidas, lo que genera incertidumbre respecto de las condiciones impuestas y su fiscalización.