Trump endurece la ofensiva antidrogas y anuncia bombardeos terrestres contra redes narco vinculadas a Venezuela

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el inicio de una nueva fase en la ofensiva internacional contra el narcotráfico, que incluirá bombardeos terrestres focalizados contra organizaciones criminales transnacionales, con eje en rutas que atraviesan Venezuela. El mandatario aseguró que la estrategia apunta directamente a quienes considera responsables de inundar de drogas el territorio norteamericano.
Durante una declaración en la Casa Blanca, Trump sostuvo que esta etapa representa una profundización de la campaña naval desplegada en el Caribe y zonas cercanas a Venezuela, con la cual, según afirmó, se logró interceptar el 96% de las drogas que ingresaban por vía marítima a Estados Unidos. “Ahora vamos a comenzar por tierra, y por tierra es mucho más fácil”, enfatizó.
El presidente remarcó que no se trata de una acción contra un país en particular, sino contra “personas horribles que traen drogas y matan a nuestro pueblo”, aunque reconoció que Venezuela aparece como un punto clave en el esquema del narcotráfico regional. En ese sentido, insistió en que los ataques estarán dirigidos a cárteles y grupos criminales que operan de manera transnacional.
Trump aseguró que la campaña naval permitió salvar unas 25.000 vidas estadounidenses, pero advirtió que el narcotráfico tiende a adaptarse y a diversificar rutas, motivo por el cual su administración decidió avanzar con operaciones terrestres. “El número real de muertos por drogas en un año ronda las 300.000 personas”, afirmó, al justificar el endurecimiento de la política de seguridad.
El anuncio se da en un contexto de fuerte presión de Washington sobre el régimen de Nicolás Maduro y coincide con nuevas sanciones económicas del Departamento del Tesoro. La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) bloqueó bienes y prohibió operaciones en Estados Unidos de funcionarios, empresarios y empresas vinculadas al chavismo, acusados de facilitar el narcotráfico y el contrabando de petróleo.
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, acusó directamente a Maduro y a su entorno de “inundar Estados Unidos con drogas”, y explicó que las sanciones buscan cortar las fuentes de financiamiento del régimen y desarticular sus redes logísticas.
Actualmente, Estados Unidos mantiene un importante despliegue militar en la región, con unos 15.000 efectivos, el portaaviones USS Gerald R. Ford, buques de guerra, guardacostas, aviones F-18 y bombarderos estratégicos. Desde septiembre, las operaciones antidrogas dejaron al menos 87 muertos en ataques a embarcaciones sospechosas en el Caribe y el Pacífico.
Trump cerró su mensaje afirmando que la ofensiva combinará acciones militares y sanciones económicas para desmantelar lo que definió como “una amenaza directa a la seguridad de Estados Unidos”.




