Escándalo en ANSES: Funcionaria libertaria bajo la lupa por extorsión y uso indebido del cargo
Los vecinos de Río Cuarto denunciaron que la abogada libertaria Silvina Drovandi abandonó repentinamente su cargo luego de haber sido denunciada por extorsión y maltratos a empleados públicos.
En julio, es decir siete meses después de la asunción del presidente Javier Milei, la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) de Río Cuarto (Córdoba) designó a Silvina Drovandi como directora. Internamente, se creía que bajo la gobernación de Martín Llaryora los encargados de encabezar esos delicados puestos estratégicos serían exfuncionarios de Juntos por el Cambio y no de La Libertad Avanza, dado la inexperiencia de estos últimos. Sin embargo, con el pasar de los meses, las figuras se renovaron por integrantes libertarios.
Además de Drovandi, en marzo se nombró al contador Ricardo Scattolini (también alineado a LLA) en el Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (PAMI). Pero la designación que más llamó la atención fue la de la contadora y abogada Drovandi, no por su inexperiencia dentro de las funciones públicas, sino por varias denuncias que se sumarían en sus modestos meses encabezando ANSES.
«(Andrés) Bauzá ni siquiera está afiliado al partido de La Libertad Avanza», se sinceró Drovandi en una escucha exclusiva que llegó a REALPOLITIK. En ese mismo audio, la funcionaria de ANSES asegura haber estado recibiendo información donde le confirman que el armado liberal de Río Cuarto están haciendo acuerdos con Juntos por el Cambio a espaldas de los principios del armado local.
Por el momento, ningún alto funcionario del oficialismo nacional se pronunció sobre el inesperado apartamiento de la abogada y contadora encargada de ANSES de Río Cuarto. En tanto, los vecinos temen por el futuro del organismo y el manejo de los recursos públicos.
También, en esos audios se escucha a Drovandi cuestionar a otros referentes de ANSES que no siguen los lineamientos del partido. «La gente de Bauzá sigue alineada, y esa es la gente que quiero a mi alrededor». Este tipo de expresiones no solo sugieren algún tipo de favoritismo, sino que evidencian un manejo del poder que algunos interpretan como un chantaje hacia quienes trabajan en la organización, dejando entrever que la lealtad partidaria se antepone a la competencia profesional.
Denuncias de intimidación en horario laboral
Pero la polémica no termina allí, en el programa «Así son las cosas» emitido en radio La Gospel FM 102.9 de Río Cuarto, se reprodujeron audios de Drovandi y dieron con declaraciones exclusivas de trabajadores públicos que afirman haber sido violentados y/o maltratados por la funcionaria de ANSES. Estos señalamientos que no cesaron desde que asumió Drovandi a sus funciones, pero sí aumentaron en los últimos meses, fue los que habrían propiciado su repentino abandono al cargo, aunque este no se hizo de manera formal.
Puntualmente, en la mañana del 31 de octubre, mientras representaba a la ANSES en un centro de jubilados de Las Higueras, los vecinos denunciaron que Drovandi acosó a un referente local, sugiriendo que ella tenía el aval de intimidarlo de la mano de altos funcionarios, específicamente de Andrés Bauzá, apoderado de La Libertad Avanza y gerente regional de ANSES en Córdoba. Según testigos, el tono de la funcionaria habría sido amenazante, advirtiendo a varios jóvenes del departamento sobre las consecuencias de su disidencia política. Estos testimonios, sumados a las grabaciones de audio, presentan una imagen de abuso de poder que, claramente, fue duramente criticada en redes y en medios locales.
La sombra de Bauzá y la influencia de Bornoroni
Andrés Bauzá, mencionado repetidamente en las denuncias, es una figura central en la gestión de ANSES Córdoba y cuenta con una cercana relación con Gabriel Bornoroni, quien fue señalado en otras ocasiones por influencias políticas y financieras. La mención de Bauzá en las amenazas y presiones dirigidas a los jóvenes y empleados en Las Higueras fortalecen aún más dudas sobre la neutralidad de su papel en ANSES y los objetivos que persiguen sus colaboradores.
Esta situación es especialmente grave si se considera que Bauzá, en su calidad de apoderado de La Libertad Avanza y líder regional, debería ser una figura de respeto y ejemplo para los funcionarios a su cargo. No obstante, el que su nombre aparezca relacionado con presiones políticas y con un accionar que dista de los principios democráticos básicos, deja en evidencia la estructura de poder en la que las figuras de autoridad actúan sin temor a repercusiones legales o éticas.
Algunas modestas figuras políticas locales salieron a repudiar su comportamiento y exigieron una investigación completa sobre el uso de su cargo para intimidar y manipular políticamente a los empleados de ANSES y PAMI. Que estos actos se estén llevando adelante por los representantes libertarios que pregonan la libertad de expresión y repudian los «modus operandi» de la vieja política, no hace más que exponer -nuevamente- la total hipocresía de LLA.
Fuente: REALPOLITIK