La hipertensión es una pandemia, más del 30% de los adultos la padecen en Argentina
El médico cardiólogo Alejandro Meretta dijo que esta enfermedad es una amenaza, ya que es silenciosa, porque puede permanecer oculta hasta sus etapas más avanzadas. La recomendación del experto para mantener controlada la presión.

El médico cardiólogo Alejandro Meretta (MN 65971), jefe de Cardiología Nuclear en ICBA Instituto Cardiovascular, en su columna de Infobae en Vivo, resaltó la gravedad de la hipertensión arterial, al calificarla de “pandemia internacional”. En Argentina, dijo, afecta al 30% de los adultos y subrayó la naturaleza sigilosa de esta afección: “Es una enfermedad silenciosa. Entonces no da síntomas. Habitualmente se la relaciona con cefaleas, pero es muy poco frecuente que la cefalea coincide con la cifra de hipertensión”.
El especialista remarcó la importancia de la detección y tratamiento tempranos para mitigar los riesgos asociados, especialmente los cardiovasculares: “Siempre es bueno recordar que la primera causa de muerte es un factor de riesgo tan importante que va causando problemas en diferentes sistemas del organismo. Es importante tener conciencia de que si uno puede tener la posibilidad de medirse las cifras de presión y si tuviera presión elevada, tratarla. Y eso disminuye mucho el riesgo cardiovascular”.
Meretta explicó que el diagnóstico de hipertensión se establece cuando las mediciones de presión arterial superan los 140/90 mmHg. Además, destacó la accesibilidad a equipos para medir la presión arterial en casa, lo que facilita un control más regular y personalizado.
El cardiólogo también abordó cómo la hipertensión puede dañar las arterias del cerebro, afectando la microcirculación y, potencialmente, provocando deterioros cognitivos: “La hipertensión daña las arterias, con grandes infartos, pero también daña las arterias pequeñas y el daño comienza por las arterias más chiquititas, que son como las hojas del árbol”.
El doctor Meretta hizo énfasis en la importancia de la adherencia al tratamiento, y señaló que solo un cuarto de los pacientes medicados logra mantener la presión controlada: “Es crucial tener conductas de adherencia al tratamiento. Solamente un cuarto de los pacientes está bien controlado, no sirve tomar los medicamentos sin un seguimiento adecuado”.
Así, los problemas cardiovasculares, destacó la relación directa entre la hipertensión arterial crónica y diversas enfermedades relacionadas con el deterioro cognitivo. Según el especialista, “los estudios van demostrando que la hipertensión daña los pequeños vasos, y esto se llama microcirculación, que es por la cual se alimenta, se nutren los órganos y el cerebro. Este es un órgano muy sensible a los trastornos de irrigación y la enfermedad”. Por eso, es clave el manejo eficaz de la hipertensión, no solo para la salud física, sino también para la cognitiva.
Meretta también mencionó una práctica común que puede llevar a diagnósticos erróneos de hipertensión, conocida como la “hipertensión del guardapolvo blanco”. Explicó que la ansiedad de estar en un consultorio médico puede elevar temporalmente la presión arterial de los pacientes: “Hay un clásico que es la toma de la presión en el consultorio que está descrita como la hipertensión del guardapolvo blanco”. Para combatir este fenómeno, sugerimos medidas más relajadas de medición, como las realizadas en casa o con tecnología como el Holter de presión, que monitoriza la presión arterial durante 24 horas, proporcionando un perfil más exacto de la condición del paciente fuera del ambiente clínico.
Fuente: Infobae