Ocaña: «Es una vergüenza la absolución en la causa Fútbol para Todos»

Por BAE Negocios

La legisladora porteña Graciela Ocaña calificó como «una verdadera vergüenza» la absolución dictada por el Tribunal Oral Federal 1 en la causa Fútbol para Todos, que dejó sin condena a los exjefes de Gabinete Aníbal Fernández y Jorge Capitanich, al expresidente de la AFA Luis Segura y a otros imputados por presuntas irregularidades en el manejo de fondos públicos entre 2009 y 2015.

La decisión del tribunal —que declaró nula la acusación del fiscal Miguel Ángel Osorio por falta de fundamentación y por violar el principio de congruencia— desató fuertes cuestionamientos de Ocaña, una de las denunciantes del caso. En declaraciones a Radio Rivadavia, sostuvo que el fallo «seguramente será apelado» y anunció que ella misma buscará intervenir en esa instancia.

«Nosotros vamos a pedir intervenir en la causa porque esto es una verdadera vergüenza», afirmó. Y apuntó contra el desempeño del fiscal: «No se puede condenar selectivamente cuando las pruebas están, y los elementos están para llevar adelante una condena. Queremos saber cuál es la argumentación del tribunal que se va a conocer ahora en marzo».

«Un negocio redondo para dirigentes, pero pésimo para los argentinos»

Ocaña repasó los ejes que dieron origen a la investigación: el desvío millonario de fondos del programa, que tenía como propósito sanear las finanzas de los clubes y garantizar la transmisión abierta del fútbol. Según detalló, el Estado pagó a la AFA «una suma muy superior a la que estaba recibiendo» por los derechos televisivos, pero ese dinero no llegó a las instituciones.

«El dinero fue malversado en la AFA», denunció. Explicó que los pagos del Estado se convertían en cheques a largo plazo que la organización descontaba a través de financieras y cooperativas con comisiones que oscilaban entre el 30% y el 50%.

«Los clubes no recibían el 100% del dinero. Era un negocio redondo para dirigentes, pero un mal negocio para todos los argentinos y también para los clubes«, remarcó. A ello sumó el impacto fiscal del programa: un déficit estatal de 7.560 millones de pesos. «Eso nos costó Fútbol para Todos, y ahora todos absueltos y a su casa, y acá no ha pasado nada», lamentó.

Cuestionamientos al fiscal y sospechas sobre la falta de acusaciones clave

La legisladora también puso bajo la lupa la actuación del fiscal Osorio, cuya acusación fue invalidada por el tribunal. Señaló que la fiscalía cometió “errores técnicos” y sugirió que no hubo voluntad de avanzar contra las dirigencias vinculadas al fútbol: “Me parece que ahí ni el fiscal ni el tribunal tenían ganas de meterse y condenar al fútbol”.

La falta de acusación contra Gabriel Mariotto, coordinador del programa durante su ejecución, fue uno de los puntos que más cuestionó: “El fiscal no pudo explicar por qué no lo acusó. Y eso fue un argumento que el tribunal tomó en cuenta”.

Según sostuvo, gran parte de la acusación original construida por la jueza María Servini fue descartada durante el juicio oral.

Anuncio de intervención en la apelación

Ocaña confirmó que utilizará su rol de “amiga del tribunal” —estatus otorgado por Servini en la instrucción— para participar del proceso una vez que se conozcan los fundamentos del fallo el 11 de marzo. “Voy a sumar el pedido de apelación y voy a demostrar que primero la pena que se había pedido era muy baja. Vamos a pedir penas más altas y cómo está probada la responsabilidad”, adelantó.

“No voy a cejar hasta que haya justicia. No quiero que un tecnicismo impida dictar una sentencia”.

Con la absolución dictada por el TOF 1, el futuro del caso queda ahora en manos de la Cámara de Casación, que deberá resolver si convalida la nulidad de la acusación o habilita un nuevo juicio. Según Ocaña, “las pruebas están” y la causa “no puede terminar en la nada”.