Alertan por casos de grooming en una aplicación que es furor entre los chicos: “Los padres no tienen idea de que existe”

OmeTV es una plataforma que permite realizar videollamadas de forma aleatoria con usuarios de todo el mundo; en el último tiempo, aumentaron los casos de niños y adolescentes que fueron contactados por pedófilos, expuestos a pornografía y a otras formas de violencia sexual.
Por María Ayuso para LA NACIÓN
A Benicio le gustó la idea de que, con solo un click, podía tener una videollamada con personas del mundo entero: completos desconocidos con los que hablar de cualquier cosa y, quizás, hasta la posibilidad de “conocer chicas lindas”. Si alguien no le caía bien, deslizaba su dedo por la pantalla y pasaba a otra persona. Así de fácil. Esa aleatoriedad le parecía divertida.
Tiene 12 años y fue en su colegio de Belgrano donde un compañero le habló por primera vez de OmeTV: “Está buenísima”, le dijo. Empezó a usarla con frecuencia hace dos meses, cuando volvía de clases y se encerraba en su cuarto (a sus papás les decía que estaba haciendo la tarea) o tarde por la noche. En la aplicación, puso que tenía 18 años, pero ninguna de las personas con las que hablaba se sorprendían al ver del otro lado a un preadolescente de 12.
Un día, empezó a charlar con un desconocido de unos 30 años. Benicio había puesto en el filtro que quería contactarse con mujeres, así que le llamó la atención cuando apareció el hombre. Tenía acento mexicano (al menos, eso le pareció al chico) y arrancaron a hablar de fútbol. Al chico le cayó simpático, pero después el hombre comenzó a “hablar de sexo” y a hacerle todo tipo de preguntas íntimas. Le propuso que miraran pornografía y, finalmente, le mostró sus genitales. “No le cuentes a nadie”, llegó a advertirle antes de que el chico cortara la llamada.
A partir de ahí, Benicio —su nombre fue cambiado para perseverar su identidad— empezó a tener problemas para dormirse por la noche. Sentía vergüenza, culpa, miedo de que sus papás se enteraran y, al mismo tiempo, una enorme curiosidad por seguir viendo pornografía. Su rendimiento en la escuela empezó a bajar, su mamá lo veía más “apagado” y sumamente nervioso, hasta que decidieron consultar a una psicóloga.
“Le costó mucho hablar del abuso que había sufrido. Sus padres no tenían la menor idea de que existía esta aplicación ni sabían por lo que había pasado”, cuenta la profesional.
Como Benicio, son muchos los preadolescentes y niños que usan OmeTV, exponiéndose a ser víctimas de grooming, entre otros delitos. Shutterstock
En los últimos meses, la plataforma OmeTV empezó a ganar cada vez más popularidad entre niños, niñas y adolescentes de nuestro país, permitiéndoles realizar videollamadas o chatear por texto con desconocidos. Si bien tiene ya unos años (nació en 2015), fue en el último tiempo que se instaló fuertemente en la Argentina y otros países de la región, como México y Colombia. Solo en Google Play Store tiene 100 millones de descargas.
Si bien se presenta como un espacio para “hacer nuevos amigos”, desde Grooming Argentina advierten que su falta de controles adecuados puede exponer a los chicos y las chicas a situaciones de riesgo: “Esta plataforma de videollamadas aleatorias está explotando: hace algo más de un mes salimos a advertir lo que estaba pasando. Con un simple deslizamiento, los chicos pueden conectarse con desconocidos en cuestión de segundos y sin necesidad de haberse registrado, lo que facilita mucho la exposición al contacto con posibles pedófilos y agresores”, sostiene Hernán Navarro, director ejecutivo de Grooming Argentina. “OmeTV es un fenómeno de riesgo absolutamente subestimado”, agrega.
Desde LA NACION probamos la aplicación: en solo 10 minutos, tuvimos videollamadas con nueve niñas, niños y adolescentes que se encontraban solos o en grupo. Algunos, incluso, estaban transmitían desde sus aulas. En otras transmisiones en vivo aparecerían adultos, a muchos de los cuales no se les veía la cara, buscando ocultar su identidad.
OmeTV funciona de una forma muy similar a una plataforma anterior llamada Omegle, que cerró en 2023, y acerca de la cual desde Grooming Argentina recibieron muchas denuncias. El cierre estuvo vinculado a sus problemas de seguridad y a denuncias de violencia sexual en niños. Sin embargo, surgieron otras aplicaciones que ofrecen el mismo sistema de videollamadas aleatorias.
“Desde el cierre de Omegle, OmeTV ganó popularidad de forma muy creciente, especialmente entre adolescentes, al ocupar el mismo espacio de interacción ‘sin reglas’, con pocos controles de seguridad y anonimato total”, detalla Navarro. Su funcionamiento es muy simple: basta con abrir la app o la web, activar la cámara y comenzar a “saltar” de una videollamada a otra. “Esa combinación de inmediatez, azar, anonimato y exposición genera un cóctel peligroso”, advierte el director ejecutivo de Grooming Argentina. “Los adultos con fines delictivos ya saben que los chicos están ahí”.
“Era un secretito”
Amparo puede entender perfectamente lo que pasó Benicio. Hoy tiene 19 años y está en la facultad. Pero, a los 8, fue víctima de abuso sexual en Omegle, la antecesora de OmeTV. “Para entender cómo llegué a Omegle es clave conocer un poco la dinámica de mi casa. Soy la menor de tres hermanos. Ellos ya eran adolescentes y no tenían ganas de jugar con una nena”, reconstruye la joven. “Mi papá y mamá estaban desgastados, trabajaban todo el día. A mí papá solo lo veía en la cena y si bien mi mamá estaba en casa, siempre estaba en la planta baja trabajando y yo arriba en la compu. Estaba en mi casa, pero sola. Y tenía libre albedrío en la compu”.
Un día, en YouTube le apareció un video de Omegle y decidió entrar. Tenía 8 años. “Siempre me dijeron ‘no hables con extraños’, así que cuando entraba a Omegle sentía un rush de adrenalina y me volvía adicta a esa sensación porque sabía que estaba haciendo algo mal, aunque no entendía por qué. Creo que hubiera estado bueno que en lugar de decirle la frase así nomás alguien me hubiese explicado por qué no se habla con extraños”, dice Amparo.
“Por la dinámica que había en mi casa yo no tenía con quién hablar y Omegle llenaba ese vacío”, asegura la joven. La usaba con frecuencia, en general desde las 12 de la noche hasta las cuatro de la mañana. “A veces esperaba a que mi mamá se fuese al supermercado y entraba”.
Al igual que sucede hoy con OmeTV, Omegle ofrecía videollamadas al azar. En al menos tres oportunidades, Amparo se conectó con hombres que la violentaron sexualmente. “Tendrían mínimo 40 años. Con uno la conversación empezó siendo inofensiva y la fue llevando hacia el lado de lo sexual hasta el punto de mostrarme cómo se masturbaba. Con los otros dos hubo menos charla inofensiva, fueron directo a lo sexual y también me mostraron cómo se masturbaban. Uno de ellos me pedía que yo dijera ciertas cosas mientras él lo hacía”, reconstruye Amparo.
También tuvo experiencias por el chat escrito (una posibilidad que también ofrece hoy OmeTV): “Decía mi edad verdadera, 8 años, o si mentía decía que tenía 13, e igual la conversación seguía”. Nadie estaba al tanto de esas conversaciones. “Un día mi mamá me encontró y no me indagó, solo me retó, y al otro día volví a usar Omegle, sintiendo aún más adrenalina. Esos hombres te tiraban comentarios para que vos entiendas que usar Omegle era un secretito”.
“Me corrompió completamente”
Amparo elige contar su historia para visibilizar una problemática creciente. Dice que hoy es sumamente frecuente que niños, niñas y adolescentes usen plataformas como OmeTV y otras similares, que los exponen a ser víctimas de grooming, entre otros delitos.
“Después de haber pasado por esas tres videollamadas y haber tenido conversaciones por el chat de Omegle también sexuales, terminé en sitios pornográficos. ¿Cómo me impactó? Me corrompió completamente. Siempre hay videos raros en esos sitios, como orgías o un padre teniendo relaciones con su hija. Empecé a tener pesadillas y me sentía culpable. Hasta el año pasado pensaba que mi mente era macabra”.
Hoy Amparo está en pleno tratamiento. “Tengo un diagnóstico de trauma por estas experiencias. Es algo que me atraviesa todos los días: puedo estar en clase y arrancar a recordar estas experiencias hasta que mi mente se satura y se me pone todo negro. Suena el timbre y por ahí pasaron dos horas en que estuve con todo negro, tiesa. Me apago, literalmente”.
Además, agrega: “No puedo mirar a señores mayores a los ojos, me da escalofríos, náuseas y tengo insomnio en parte porque cuando llega la hora de ir a dormir se me viene a la cabeza las imágenes de estos tres hombres. Mi cerebro no para de maquinar”.
El submundo de la pedofilia
Navarro cuenta que en el último tiempo, a nivel mundial, en OmeTV se registraron un aumento “de interacciones dañinas similares a las previamente asociadas con Omegle y Chatroulette”, que es otro sitio del estilo.
Desde mediados del año pasado, investigaciones revelaron “un aumento en las publicaciones rastreadas en la Darknet relacionadas con OmeTV”, es decir, referidas al uso de esa plataforma “como un punto de contacto o temática de conversación en foros y mercados ocultos donde operan redes de pedofilia”.
La darknet (o Internet oscura/dark web), explica Navarro, es una parte oculta de Internet que no se puede encontrar con los navegadores comunes como Chrome o Safari ni aparece en Google: “Para entrar, se necesita un software especial, como Tor, y hay espacios donde se puede mantener el anonimato total. En ese submundo habita la subcultura de la pedofilia. Se intercambian desde metodologías de captación hasta material delictivo, incluyendo la mal llamada ‘pornografia infantil’”, es decir, material de explotación sexual de niñas, niños y adolescentes. “OmeTV aparece cada vez con más frecuencia como una plataforma mencionada entre usuarios que ya tienen antecedentes o patrones delictivos”, agrega Navarro.
“Puede generar estrés postraumático”
¿Cuál es la consecuencia de que los chicos estén expuestos a pornografía? La psiquiatra Juana Poulisis explica: “El encuentro con la pornografía genera vergüenza, culpa, lo cual los lleva a no contarlo. Pero también es como una adicción. Las consecuencias son de todo tipo: desde emocionales, hasta cognitivas y conductuales. Su cerebro, que no ha madurado, no puede procesar esas imágenes: se genera una visión distorsionada de la sexualidad y del encuentro con una pareja. Además, produce hipersexualización precoz y ansiedad”.
Entre las consecuencias, puede generarse un estrés postraumático: “Es una patología psiquiátrica que en general aparece a partir de un trauma o más adelante y tiene diversos síntomas: sensaciones físicas de lo que viviste, imágenes intrusivas, flash backs, desregulación emocional y el evitar situaciones que te recuerden ese momento”.
Volviendo a Amparo, ¿qué le diría si pudiese darle un mensaje a padres de niños y adolescentes? “Que hoy en día es normal que muchos nenes usen estas aplicaciones. Hay que cuidarlos de ese universo tan peligroso que está adentro de las propias casas, en la computadora o el celular. Les sugiero que indaguen y repregunten cuando sus hijos les hablen sobre un juego nuevo, ya que varios, como Roblox, tienen la posibilidad de chatear con desconocidos”.
A quienes pasaron por algo similar, su mensaje es: “Que sepan que no tienen una mente macabra, que alguien los lastimó y que hablen con un terapeuta si es posible”. Y si en su familia no hay nadie con quien puedan conversar, “que busquen a alguien más, como una maestra”.
Para Navarro, “el crecimiento de OmeTV no es solo un dato: es una advertencia”. “No podemos seguir mirando para otro lado mientras miles de adolescentes se exponen, sin ningún tipo de mediación adulta, a espacios donde el daño puede ser inmediato, invisible y profundo”, concluye el especialista.
Más información
- En la guía “Hablemos de abuso sexual”, elaborada por de Fundación La Nación de la mano de reconocidos especialistas, podés encontrar información útil sobre esta problemática: desde señales de alerta hasta dónde pedir ayuda.
- Grooming Argentina: es una organización social que se dedica a la visibilización, concientización y capacitación vinculada con este delito. Tiene una aplicación donde pueden realizarse denuncias.
Más información
En la guía “Hablemos de abuso sexual”, elaborada por Fundación La Nación con el aporte de destacados especialistas en esta problemática, podés encontrar más información sobre señales de alerta, cómo actuar ante una sospecha o develación de un caso de violencia sexual en la infancia o adolescencia y dónde pedir ayuda. Ingresá acá
Fuente: LA NACIÓN