Esta vez no zafó: hija del narco argentino, Carlos Salvatore fue condenada a 5 años por lavado de dinero
Enorme trabajo del fiscal Federico Carniel y su equipo

Carla Salvatore, de 43 años e hija del fallecido narcotraficante Carlos Salvatore, conocido como el «mayor narco argentino», fue condenada este martes a 5 años de prisión por integrar una banda que lavaba dinero proveniente del tráfico de estupefacientes liderado por su padre.
Carlos Salvatore, un abogado que llegó a traficar cuatro toneladas y media de cocaína a Europa, murió en 2019 mientras cumplía una condena de 21 años por el caso «Carbón Blanco», escándalo que puso al Chaco en los diarios del mundo.
Aunque Carla Salvatore había sido absuelta en primera instancia en el juicio por lavado de dinero que tuvo veredicto en marzo de 2019, la apelación del fiscal llevó a la Cámara Federal de Casación Penal a ordenar un nuevo juicio en su contra. Ahora, el panorama judicial para la hija del capo narco ha dado un vuelco.
Carlos Salvatore, quien movió una fortuna estimada en 101 millones de euros en droga entre 2012 y 2015, no llegó a presenciar el juicio por lavado que involucró a su esposa, su suegro y su administrador, quienes recibieron penas de entre 7 y 9 años de prisión. Carla, en ese entonces, había sido absuelta.
Sin embargo, tras la insistencia de la fiscalía, la justicia revisó el caso de Carla Salvatore, quien finalmente fue hallada culpable de formar parte de la estructura criminal que blanqueaba los millonarios ingresos del narcotráfico de su padre. Al momento del veredicto, Carla Salvatore se encontraba en libertad y continuará en ese estado hasta que el fallo quede firme.
Durante el proceso judicial, el fiscal federal de Chaco, Federico Carniel, le había ofrecido a Salvatore un juicio abreviado con una pena de tres años en suspenso, oferta que ella rechazó.
En una entrevista concedida a Clarín en diciembre de 2019, Carla Salvatore había intentado desligarse de las actividades de su padre, con quien aseguraba tener una relación distante desde el divorcio de sus padres cuando ella tenía 9 años. «Mis padres se separaron cuando yo tenía 9 años y a él recién lo volví a ver a los 24, cuando me estaba por casar. Todo su entorno estaba muy ajeno a mi vida. Yo no tenía relación», declaró en aquel entonces. Incluso mencionó que su padre había declarado estar haciendo sociedades para dejarla fuera de la herencia.
Salvatore también expresó el estigma que le significaba ser la hija de un narcotraficante de tal magnitud, especialmente por el impacto en sus hijas. «Para muchos, al ser la hija de… ya soy culpable. Soy la hija de Salvatore, no se necesita más que el ADN», lamentó.
Respecto a la sociedad SALCROI, que la vinculaba al lavado de dinero, Salvatore sostuvo que la había formado junto a su marido y que la mención de su padre en correos electrónicos no implicaba su participación en la creación o financiación de la misma. También negó haber sido una comercializadora importante de los departamentos construidos con dinero ilícito por su padre, argumentando que solo había vendido «dos departamentos» y que otras comercializadoras no habían sido acusadas.
A pesar de su defensa y de haber sido absuelta en el juicio original, la Cámara de Casación revirtió la situación al considerar que ciertos elementos no habían sido debidamente valorados, especialmente el papel de la sociedad SALCROI. Finalmente, el nuevo juicio determinó su culpabilidad, marcando un revés en su intento por desligarse del oscuro legado de su padre.
El Chaco y el caso “Carbón Blanco”
El caso «Carbón Blanco» fue una resonante investigación judicial en Argentina que desarticuló una organización narcocriminal dedicada al envío de toneladas de cocaína a Europa, oculta en cargamentos de carbón vegetal.
Los puntos clave del caso:
Modus Operandi: La banda utilizaba empresas fachada dedicadas a la producción y exportación de carbón vegetal. En el interior de los bolsones de carbón, ocultaban grandes cantidades de cocaína de alta pureza con destino a países europeos, principalmente Portugal y España.
Cabecilla Principal: Carlos Salvatore, un abogado oriundo de Santiago del Estero, fue identificado como el líder y principal organizador de esta red de narcotráfico. Su conocimiento legal y sus contactos le permitieron establecer la logística y las empresas necesarias para llevar a cabo los envíos.
Dimensiones del Tráfico: Se estima que la organización de Salvatore logró traficar más de cuatro toneladas y media de cocaína a Europa, generando ganancias millonarias. Esto lo posicionó como el «mayor narco argentino» de la época.
Investigación y Detenciones: la investigación fue compleja y demandó un trabajo coordinado entre la justicia federal y las fuerzas de seguridad. A lo largo del proceso, se realizaron múltiples allanamientos y detenciones, involucrando a empresarios, productores de carbón y colaboradores de Salvatore.
Juicio y Condenas: el juicio oral por el caso «Carbón Blanco» culminó con duras condenas para varios de los integrantes de la banda. Carlos Salvatore fue condenado a 21 años de prisión por ser el organizador del tráfico de estupefacientes. Su esposa, su suegro y su administrador también recibieron penas significativas por su participación en el lavado de dinero proveniente de la actividad ilícita.
Muerte de Carlos Salvatore: Carlos Salvatore falleció en mayo de 2019 mientras cumplía su condena en el Hospital Argerich de Buenos Aires. Su muerte ocurrió poco antes del veredicto del juicio por lavado de dinero en el que su hija, Carla Salvatore, fue inicialmente absuelta.
Impacto: el caso «Carbón Blanco» tuvo un gran impacto en la opinión pública argentina, revelando la sofisticación de las organizaciones de narcotráfico y sus conexiones con el mundo empresarial y profesional. También puso de manifiesto la magnitud del tráfico de drogas hacia Europa y la necesidad de fortalecer los controles y la cooperación internacional para combatirlo.
¿Por qué Chaco?
Chaco aparece en el caso «Carbón Blanco» porque la provincia fue un punto clave en la logística y la operación de la organización narcocriminal liderada por Carlos Salvatore.
Base de Operaciones: gran parte de la estructura operativa de la banda tenía asiento en la provincia de Chaco. Aquí se encontraban las empresas con fachada dedicadas a la producción y empaquetamiento del carbón vegetal, que era utilizado como cobertura para ocultar la cocaína.
Producción y Empaquetamiento del Carbón: las localidades chaqueñas como Quitilipi eran centros de producción de carbón vegetal, lo que facilitaba la creación de una fachada creíble para sus actividades ilícitas. Los cargamentos de droga se preparaban y ocultaban en los bolsones de carbón en esta provincia.
Logística de envío: Chaco, por su ubicación geográfica, era un punto de partida estratégico para el transporte de la droga hacia los puertos desde donde se enviaba a Europa. Las rutas terrestres desde la provincia permitían conectar con los nodos logísticos necesarios para el tráfico internacional.
Detenciones e Investigación: gran parte de la investigación y las detenciones de los miembros de la banda se llevaron a cabo en la provincia de Chaco, incluyendo allanamientos a empresas, propiedades y domicilios vinculados a la organización.
Juicio: el juicio oral del caso «Carbón Blanco» se llevó a cabo en la provincia de Chaco, específicamente en la ciudad de Resistencia, debido a que allí se cometieron gran parte de los delitos investigados y donde residían varios de los imputados.
En resumen, Chaco fue el epicentro de la producción, el ocultamiento y la logística del tráfico de cocaína de la banda de Carlos Salvatore en el marco del caso «Carbón Blanco». Por esta razón, la provincia tuvo un rol central en la investigación y el desarrollo del proceso judicial.
El caso «Carbón Blanco» desmanteló una importante red de narcotráfico liderada por el abogado Carlos Salvatore, quien utilizaba la fachada de la exportación de carbón vegetal para enviar toneladas de cocaína a Europa. El juicio y las condenas marcaron un hito en la lucha contra el narcotráfico en Argentina.
Fuente: propia y con información de Clarín