Sorprendió que Zunilda Niremperger, una jueza con perfil moralista y que se autopercibe inmune a la corrupción y otros males, se sume junto a otras magistradas a nivel nacional para respaldar la postulación de Ariel Lijo para integrar la Corte Suprema.
Maria Servini, Maria Eugenia Capuchetti, Sabrina Namer, Mirta Delia Tyden, Alejandra Mángano, Maria Paula Marisi, , María Verónica Skanata y Silvia Cavallo, Karina Perilli, Victoria Pérez Tognola, se pronunciaron a favor de la propuesta del presidente Javier Milei.
El modelo de adhesiones: «Tomá, rellenalo y devolvelo hoy mismo»
La cadena de adhesiones a nivel nacional no solo funcionó eficientemente, sino también a ultra velocidad. Este «paper» fue distribuido y requerido en tono imperativo, como si se tratara del Ejército u otra fuerza de seguridad.
Lijo fue una tortuga para atacar casos de corrupción y ciego para accionar contra los ladrones de cuello blanco.
La chaqueña Lilita Carrió, había denunciado a los hermanos Lijo por enriquecimiento ilícito y además, ellos ofrecían impunidad a empresarios y funcionarios que tenían problemas en la Justicia, ese fue siempre su rol más destacado, además de lobista judicial. ¿Quién fue el abogado de Lijo brohter´s? Pues, nada más y nada menos que el actual Ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona.
Lijo también salvó a los peces grandes en la causa The Old Fund, donde bajo la figura de arrepentido Alejandro Vandenbroele confesó que repartió dinero ilícito por el canje de la deuda que Formosa mantenía con el Estado nacional. Aquí, el juez “limpiador”, remitió parte del expediente a la Justicia de Formosa, donde -como era de esperar- la presunta participación del gobernador Gildo Insfrán ni de sus funcionarios, no pudo ser vista por los serviles jueces formoseños.
The Old Fund, Jorge Capitanich y Martín Cortés
«Todo tiene que ver con todo» y las relaciones y beneficios que trae poner un juez, tiene una deuda interminable que lleva más de una vida «pagarla», en beneficio del «gestor» pero también para la beneficiada.
Para el caso, recordemos que Zunilda Niremperger llegó a la magistratura gracias a Jorge Capitanich y ese asunto, ella misma lo hizo público. ¿Por qué una jueza que se cree la Lilita Carrió de la Justicia Federal chaqueña, apoyaría a un juez que quiere ingresar tan «embarrado» a la Corte Suprema de Justicia de la Nación?
Lijo no solo salvó a Gildo Insfrán, sino a Martín Cortés que fue procesado en el caso «Boudougate», cuando presidía el Banco de Formosa en 2010 y fue el brazo ejecutor de Coqui en la conducción bancaria: operaba y lo representaba en Formosa, ante el mandamás provincial.
The Old Fund había cobrado 1.700.000 dólares en 2010 por la operación con el banco de Formosa y luego entregó parte de ese botín a Martín Cortés, quien fue socio de Jorge Capitanich en la productora “El Puente” y llegó a Formosa -justamente-de la mano de “Coqui”.
Lijo además tuvo tres denuncias ante el Consejo de la Magistratura, como dice el dicho “billetera mata galán”, pero aplicada a la Justicia Federal de Argentina, las causas quedaron o en la nada o en el freezer judicial federal, que todos sabemos que existe y es el espíritu inmortal de la Casta de la Justicia Federal.