Tragedia en Flores: murió un bebé al caer por el hueco de un ascensor en un edificio de avenida Avellaneda

Un bebé de un año y cuatro meses murió este martes tras caer por el hueco de un ascensor desde el octavo piso de un edificio ubicado sobre avenida Avellaneda al 2400, entre Fray Cayetano Rodríguez y Caracas, en el barrio porteño de Flores.

El hecho ocurrió pasado el mediodía y, según las primeras investigaciones, el accidente se habría producido por una falla en la puerta del elevador, aunque las circunstancias concretas aún son materia de peritajes. De acuerdo con fuentes policiales, el niño se precipitó al vacío desde el octavo piso del edificio de planta baja y diez niveles.

Inmediatamente después del siniestro, una ambulancia de la colectividad judía Hejaulutz llegó al lugar y le practicó las primeras maniobras de atención al menor. Minutos más tarde arribaron efectivos de la Comisaría Vecinal 7C de la Policía de la Ciudad y personal de Bomberos, alertados por un llamado al 911.

También se presentó una ambulancia del SAME, que trasladó al bebé de urgencia al Hospital Álvarez. Pese a los intentos de reanimación por parte del personal médico, se constató su fallecimiento.

Los padres del niño fueron asistidos por equipos de contención psicológica ante la gravedad de la tragedia.

En la causa interviene la Fiscalía Criminal y Correccional N° 12, a cargo del fiscal Roma, quien ordenó la presencia de la Unidad Criminalística Móvil para realizar las tareas periciales correspondientes. Se labraron actuaciones por “averiguación causales de muerte de dudosa criminalidad”, mientras se avanza en la investigación sobre el estado del ascensor, el sistema de seguridad de las puertas y las posibles responsabilidades.

El hecho generó una profunda conmoción en la comunidad judía de Flores. En un mensaje difundido en redes sociales, el Gran Rabino de la AMIA, Eliahu Hamra, confirmó que la víctima se llamaba Akiva Dabbah y expresó:

“Hoy es un día de profunda tristeza para la comunidad judía del barrio de Flores, por el trágico fallecimiento de Akiva Dabbah, un pequeño niño de un año y ocho meses. En estos momentos de tanto dolor, abrazamos a su padre Rafael y a su madre Denise. Agradecemos a las autoridades policiales, servicios de salud, la fiscalía y la morgue de la Ciudad por la actuación comprensiva y de acompañamiento. Rezamos por la elevación de su alma y para que todos sus seres queridos puedan encontrar consuelo”.

La investigación continuará para determinar si existieron fallas de mantenimiento, negligencia o incumplimiento de normas de seguridad en el funcionamiento del ascensor del edificio.

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